No sabemos como sigue la canción
cerramos los ojos.
los labios secos.
Buscará entonces la manera de tocar mi pierna
y lo dejaré.
Dirá que me quiere
y le creeré,
le creeré con toda mi alma
goteando sobre las mesas
relámpago a trueno y relámpago
esperaré su abrazo
y la fe.
Abriré los ojos sólo para cerrarlos otra vez.
habrá
ápice
de cielo que me detenga,
lo seguiré desde la distancia de un cielo muerto
suspirando a trueno y contrarrelampago.
Buscando su voz entre tanto jazz exhalado de las paredes
podré irme entre sus dedos,
mientras el saxofón corre y no me queda voz,
y la imagen se diluye.
y debo apretarme a él como a un castigo
forzando la imagen tanto como las piernas
obligándome a creer que este hedor ebrio es el mismo de ayer
y sus manos partidas y frías
no son las del extraño que me sujeta sobre mi angustia
sino las que se reparten sobre el piano
inclemente para mi boca.
Y podré reír,
a carcajadas sobre su pecho negro
olvidando que no sé su nombre
y que apenas recuerdo el mio.
.